Yoyce Barfield, joven docente y primera Presidenta de la Institución Atlética Larre Borges.
Yoyce a sus jóvenes 34 años de edad, tenía como profesión la docencia, era madre de tres hijos y también realizaba tareas administrativas.
Dirigir los destinos de una Institución no iba a ser tarea sencilla para nadie. Menos aún cuando la misma militaba en la Segunda de Ascenso. Pero, claro, para la Sra. Joyseleen Barfield las dificultades eran barreras que había que derribar y así fué, elegida por unanimidad de votos. Un gran motivo de orgullo para ella y su familia.
En una nota que le realizaron en el diario «El País», se pudieron destacar las siguientes expresiones.
P- Pero, ¿cómo arriba una mujer a la presidencia de Larre Borges?
YB- Simple, soy una vieja socia de la Institución. Llegó el periodo eleccionario, había varias corrientes que se trataban de unificar. De las discusiones salió mi nombre y hubo consenso general. Solo faltaba mi aceptación y aquí estoy.
P- Por delante una dura tarea. Quizá llevar a Larre Borges a la divisional de privilegio. Quizá aumentar el caudal social; de pronto gastar un platal en fortalecimiento deportivo-competitivo..
YB -Sin duda habrá que trabajar, y mucho. Pero tenemos la gran esperanza de salir adelante en nuestra meta. Porque es mucha la gente que ha reaparecido por Larre Borges en estos días y ellos por sí solos están manifestando un respaldo unánime. Mucho más que aceptar la conformación de una lista única. Y precisamente nuestro objetivo, no está, no ocupa el lugar privilegiado en lo que al ascenso se refiere.
Tampoco el aumento del caudal social. Un miliar de socios para una Institución de Segunda es un número importante. Claro que si, vienen más, mucho mejor y bienvenidos.
Pero, nadie desconoce que Larre Borges está enclavado en una amplia zona de nuestra sociedad, que precisa mucho y con urgencia la obra social. Ahí está dirigido nuestro esfuerzo.
Después, si en esta temporada sumamos buena puntuación, de pronto el año próximo nuestro objetivo primario está allí.
P- De conversación pausada, de conceptos firmes. De convicciones certeras; Humilde en la expresión; agradable, inteligente. Nada de plataformas altisonantes para llegar…
«Es común escuchar a quienes llegan a la presidencia de un club, decir… voy a dar un año de mi vida. Yo digo lo contrario. Le pido a Larre Borges que me regale un año más de vida.»
Extracto extraído del diario «El País»
